Cuidadores
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Cuidadores

¿Quién cuida al cuidador?

No todo el mundo puede valerse por sí mismo. Hay personas que por enfermedad, accidente, situación personal o edad dependen de la atención de otra persona para realizar las actividades de la vida diaria. Si tenemos en cuenta la edad, vemos que a muy temprana edad los niños necesitan la supervisión y los cuidados de sus padres, pero también cuando la edad es muy avanzada, es más que probable que los ancianos necesiten de cuidados, ya sea porque han perdido capacidades físicas, capacidades mentales, o ambas. En estas situaciones, suele haber un cuidador (o cuidadora, lo cual es más habitual) que se encarga del bienestar y el cuidado de la persona en cuestión.

Desde nuestra consulta de psicología en Ponferrada vemos que la persona cuidadora puede olvidarse de sí misma. Es muy común, que la persona se cargue más de lo normal, ya que tiene que sumar a sus actividades cotidianas todo lo relativo al cuidado de la persona dependiente, descuidando a su vez partes de su vida de gran importancia, como son las relaciones sociales, su pareja, su trabajo, su ocio o su descanso. Cuando esta situación se prolonga en el tiempo es frecuente que se produzca el conocido como Síndrome de Burnout (o estar quemado), que se caracteriza por un bajo estado de ánimo, irritabilidad, pérdida de reforzadores, estrés y posible disminución del cuidado personal.

¿Cómo puede evitar la persona cuidadora este desgaste emocional?

a) En la medida de lo posible, el cuidador debe de dar toda la autonomía posible al cuidado, no asumir acciones que la persona dependiente pueda realizar por su misma, para no cargarse con algo que no le corresponde. Esto requerirá analizar lo que la persona dependiente puede realizar, y dotarle de responsabilidad para esas tareas, lo cual es beneficioso para ambas partes.

b) Pide ayuda. Las personas no tenemos superpoderes, todos tenemos límites y en ocasiones necesitamos el apoyo de los demás, ya sea un familiar, a un amigo o a un profesional. Si tú estás dispuesto a ayudar, ¿por qué no permites que te ayuden? En ocasiones las personas no se dejan ayudar debido a que creen que los demás lo van a hacer mal, que solo ellos saben como hacer bien las cosas, o porque se empeñan en querer hacer las cosas de una manera determinada y de ninguna otra forma posible. Sé flexible, dejate ayudar, delega.

c)Saca tiempo para ti. Estudia opciones como centros de día, periodos alternos con familiares, guarderías y actividades extraescolares para los más pequeños, para dedicarte tiempo a ti, a divertirte, a hacer cosas que te gusten, o simplemente para descansar y desconectar un poco.

d) No descuides tus proyectos, tus sueños y tu entorno. No solo eres cuidador/a, eres mucho más que eso.

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